
Empieza la cuenta atrás para la Navidad, las fiestas y, para los más afortunados, unas deseadas vacaciones. Cada vez es más habitual aprovechar estas fechas para hacer una escapada en busca del calor, descubrir alguno de los bonitos mercados navideños o disfrutar de la nieve. Tanto si viajas en familia, con amigos o en pareja, en este post te damos algunas ideas para vivir una Navidad diferente, a unos cuantos kilómetros de casa. ¿Te animas?
1.- Noruega
¿Sueñas con una blanca Navidad? ¿Por qué no vas más allá incluso y pasas las fiestas en el mismísimo Círculo Polar Ártico? Los meses de invierno son los más indicados para ver auroras boreales y Tromso, en el norte de Noruega, es uno de los mejores lugares del mundo para verlas. Aprovecha para visitar sus mercados de Navidad y prueba las tradicionales galletas de jengibre, ¡no podrás resistirte! Y mientras esperas para ver las auroras, aprovecha la nieve para dar una vuelta en trineo, ver renos en libertad, practicar esquí de fondo o hacer muñecos de nieve, ¿hay algo más navideño?
2.- Hawaii
Si lo que buscas son unas Navidades al sol, ¿qué mejor lugar que Hawaii? Este paraíso de aguas cálidas celebra la tradicional Navidad con un toque hawaiano. Durante todo el mes de diciembre Hawaii se viste de fiesta con desfiles, fuegos artificiales y villancicos navideños a ritmo de ukelele. Incluso podrás dar la bienvenida al mismísimo Santa Claus que aparca el trineo y llega cada año en canoa a la playa de Waikiki.
3.- Japón
En Japón el día de Navidad no es festivo, pero fin de año y Año Nuevo es uno de los más importantes del calendario japonés por eso podrás disfrutar del ambiente navideño y los preparativos para recibir el nuevo año. El invierno japonés suele ser seco, frío y tiene la nieve como gran protagonista, así que hay que abrigarse bien. No te pierdas los maravillosos festivales de la nieve o yuki matsuri (雪祭り) del noreste de Japón. Además, el 23 de Diciembre, día festivo en Japón, podrás festejar el cumpleaños de su emperador, Akihito, una verdadera fiesta repleta de las celebraciones y sushi fresco. Si te quedas para la víspera de Año Nuevo, tienes que ver la celebración y los rituales en el Templo de Meiji.
4.- Zambia
Zambia es uno de los países africanos más auténticos, menos conocido y visitado que Kenia o Tanzania, no tiene nada que envidiarles. De tradición cristiana, celebran la Navidad a 35 grados, van a misa, cantan villancicos, hay fuegos artificiales y sobre todo música, en Zambia la música nunca falta. Además de mezclarte con sus alegres lugareños, aprovecha el viaje para descubrir su fauna salvaje en un safari, surcar las aguas del río Zambezi, recorrer los mercados de Lusaka y visitar las impresionantes Cataratas Victoria, en la frontera con Zimbabwe, un espectáculo natural de gran belleza. Sin duda, ¡una Navidad diferente!
5.- Sri Lanka
A pocos kilómetros de la India y bañada por el Océano Índico, la isla de Sri Lanka es un destino ideal para pasar una Navidades en el paraíso y disfrutar de playas de ensueño, ruinas espectaculares y cultura budista en estado puro. Diciembre y enero son meses cálidos y secos, la mejor época para disfrutar de todo lo que ofrece este país. 1.300 kilómetros de costa con playas, rincones aún vírgenes y olas para practicar surf. Avistamiento de ballenas en el sur, plantaciones de té con paisajes de cuento en Nuwara Eliya, parques naturales como Yala y Bundala donde ir de safari para ver elefantes y, con mucha suerte, leopardos, salvajes y en su hábitat. Asciende a la Roca del León, en Sigiriya y recorre el triángulo cultural del país visitando su antigua capital, Anuradhapura, las cuevas de Dambulla y las ruinas de Polonnaruwa, la ciudad perdida en la jungla. En Kandy está el Templo del Diente de Buda, donde multitud de peregrinos acudirán para celebrar la Navidad cristiana y el Año Nuevo. ¿Qué más se puede pedir?
Y tú, ¿te animas a viajar esta Navidad? Cuéntanoslo en los comentarios.
Fotos de Pixabay
Muchas gracias por las ideas de viaje, estas navidades viaje siguiendo los consejos de su publicación. Les mando un abrazo fuerte y éxitos en sus proyectos para el siguiente año. Cariños, Ana.